Vacios

Cristina se sienta en su sala de estar, en las paredes las estanterías cubiertas de libros, un poco de todo de Gabriel García Márquez, pasando por Stephen King, Matilde Asensi y llegando a Asimov ...la verdad es que reconoce que no es de escritores concretos, con algunas excepciones, es más de historias que le recomiendan o que lee en los periódicos o cuando pasa el rato en un gran almacén leyendo la contraportada del libro y le convence lo que lee...

Está sentada en el sillón con las piernas encima de los brazos de este y mirando hacía el balcón, desde donde ve un trocito de parterre donde tiene plantados los geranios y los rosales que tienen aun los capullos cerrados ...apoya una libreta en sus muslos, mientras juega con un bolígrafo entre los dedos y cierra los ojos....

Reconoce que lleva una temporada triste, no es por nada, son solo sensaciones, como si se sintiera abandonada...quizás es la astenia primaveral que se adelantó...

Reconoce que siempre ha sido peculiar, eso a veces es malo y a veces es bueno, porque hay gente que te valora esa peculiaridad cuando les interesa y te olvidan cuando también les interesa...

A Cristina sus amigos la querían por su sinceridad, siempre estaba cuando la necesitaban, les daba una de arena y otra de cal, pero siempre tenía una abrazo al final...le venían a contar sus penas, y ella a veces les apoyaba y otras hacía de abogado del diablo para que ellos mismos reaccionaran ....incluso en una ocasión una de sus amigas asistió a un psicólogo y ella la acompañó y al final acabaron hablando el experto y Cristina sobre los problemas de su amiga, y el profesional acabó diciéndole a esta última que no tenía necesidad de haber pedido cita porque teniendo amigas como está ,era como tener un psicólogo gratis...no era tan fácil encontrar a gente que escuchara y que te pusiera encima de la mesa varias verdades para que uno eligiera....

Pero Cristina también sabía que era más fácil aconsejar a los demás que a ella misma...aunque esa era otra historia ...

Tan querida y tan sola...los demás la admiraban uy que bueno le dijiste esto a Juan ...es que es verdad y como te reaccionó Beatriz pero cuando se trataba de recibir las verdades propias ya Cristina no era tan buena y eso que se callaba tantas cosas porque le gustaba abrirles los ojos pero no ofenderles y no utilizaba aquello que ellos le habían confesado en algún momento ...

Como Azul decía a veces Cristina también sabía que no era perfecta y apretaba a veces demasiado las tuercas...

Así que poco a poco fue quedándose sin amigos ....

El último fue por una chorrada, y es que a veces hay gente tan necia, que no pueden soportar que otros pueden quitarle la razón y entonces atacan sinrazón, olvidándose de todo lo bueno que les has dado, de cuando su brazo les ha cobijado y agarrándose a un clavo ardiendo siguen erre que erre en una estúpida decisión, llamando a Cristina tonta ....y ya saben aquello de cuando el vaso se llena ....y Cristina piensa que seguramente es muy tonta ....pero solo con quien quiere serlo ....

Así que Cristina se queda dormida en ese sillón, con una lágrima resbalando...no por buena, por mala, por lista o por tonta ...sino porque está cansada ....de poner de su parte...y de que si alguna vez se equivoca, no la entiendan y la ataquen...sin tener un brazo donde ella cobijarse ...

Azul le ha dicho que se relaje, que a veces hay gente que se llama amigo y no son tal...que hablando la gente se entiende cuando hay buena intención de arreglar situaciones, que le de tiempo al tiempo, que este pone las cosas en su sitio....

Y es que a veces son difíciles las relaciones ....el orgullo se vuelve dermis y te cubre todito, todito ....

Dejemos a Cristina dormir...que se recupere ...el alma de Azul se quedó en su casa...para que se sienta protegida y decirle que no pasa nada, que no está sola...mañana el sol volverá a salir...son momentos que en la vida pasan ....

Un saludo